martes, 8 de mayo de 2012

8/ 5/ 2012

Suspiros. Las olas rompen a lo lejos... casi ni las oigo... prefiero amarrarme a tu pecho y oír cómo eres más humano, oír a esa máquina tonta y frágil bombardear tu sangre. Tomas mi barbilla para que te mire a los ojos.
Tic.
Tú sobrepasas todas mis barreras. Mi único instante de paz, es cuando te miro a los ojos. A ese profundo abismo en el que no me importa perderme. A ese mar de sentimientos, de preguntas, de sonrisas y lágrimas... al centro de tu universo. Tu mirada.
Tac.
Tu dedo roza mis labios... una adrenalina incontrolable se propaga por todo mi ser al sentir tu contacto. Escalofríos. Electricidad. Aún no sé describir tu roce sobre mi piel.
Tic.
Aparentemente tranquilo, me das un beso. Cálido, suave... un beso de los tuyos. Un beso que llevas guardando para mí estos meses. Sólo yo. Ansiosa busco tu contacto. Ansiosa lo encuentro. Más y más intenso, me hacer marear.
Haz que sea eterno. Haz de estos tres segundos, un recuerdo mágico. Único. Porque me voy.
Sabes que esto no iba a ser eterno. Sabes que lloro por dentro.
Poco a poco te separas. Tus lágrimas rozan mis mejillas y resbalan por mi cuello, dejando un fino rastro de amor.
No quiero volver a tu mirada, sé que no me dejarás salir. Un fugaz beso en la mejilla. Un último abrazo. Un último adiós.

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
;